Tarjetas

Introduce la tarjeta en el lector de chip del TPV para que se solicite el tecleo del PIN.

No es obligatorio. Una tarjeta Contactless puede operar también con lectura de chip o mediante la lectura de la banda magnética. Además, si se utiliza cualquiera de estos dos métodos alternativos, siempre se solicitará el tecleo del PIN.

Existe un número limitado de compras de menos de 50 euros que puedes hacer con una tarjeta contactless, es decir, sin introducir el PIN. Por seguridad, una vez llegado ese límite, el pago te dará error.

Si te ocurre, simplemente tendrás que meter la tarjeta por la ranura del terminal y teclear el PIN, de esta forma el contador se pondrá a cero.

Todas las tarjetas ABANCA migraron a esta tecnología a lo largo del año 2016, para cumplir con los nuevos requerimientos operativos. Con tu tarjeta contactless podrás realizar compras y pagos simplemente acercando tu tarjeta a un terminal contactless. Esta nueva funcionalidad de las tarjetas no tiene ningún coste adicional para ti.

El pago contactless te ofrece:

•    Comodidad. No necesitas llevar monedas ni perder el tiempo buscando un cajero para hacer pagos de importes pequeños.

•    Rapidez. Pagarás tus compras de manera mucho más rápida y cómoda: solo tienes que acercar tu tarjeta y listo. Únicamente deberás teclear el PIN en las operaciones de importe superior a 50€.

•    Seguridad. Es un método tan seguro como con tu tarjeta habitual.

•    Flexibilidad. Válida para importes grandes y pequeños. Además también puedes usarla en dispositivos no contactless, como hasta ahora.

•    Control: Te permitirá llevar un seguimiento más detallado de todos tus gastos, incluso de los pequeños pagos.

Tu tarjeta contactless ABANCA te permite operar en cajeros y establecimientos de todo el mundo, como hasta ahora.

Puedes realizar pagos contactless en parkings, kioscos, tiendas de ropa, cafeterías… en todos los establecimientos donde veas el símbolo de contactless. Solo tienes que acercar tu tarjeta al terminal y realizar el pago. ¡Listo!

En los establecimientos que no dispongan de este nuevo sistema, tu tarjeta contactless de ABANCA igualmente será válida y podrás realizar los pagos como hasta ahora, introduciendo la tarjeta en el terminal (TPV) y tecleando el PIN. Se mantendrá operativa la banda magnética para que puedas operar también en los terminales sin tecnología chip.
 

Para realizar el pago basta con que acerques tu tarjeta a menos de dos centímetros del terminal durante un par de segundos y ya está. Solo se te solicitará el PIN en operaciones superiores a 50 €, pero en caso de que tengas una operación inferior a ese importe y resulte denegada, inténtalo de nuevo introduciendo tu tarjeta en el terminal y tecleando el PIN. En todas las operaciones podrás solicitar copia del ticket de compra, aun en las que no hayas tecleado el PIN.

Podrás identificar claramente las tarjetas contactless de ABANCA por el distintivo de contactless que aparecerá en el anverso de la tarjeta, a la derecha del chip.

Todas las tarjetas nuevas que emite ABANCA ya cuentan con la tecnología contactless. 

Para las tarjetas previas a 2016, el cambio se realiza de manera progresiva, de manera que cuando te caduque tu tarjeta actual, la nueva que te enviemos ya será contactless. 

Los pagos realizados con tarjetas contactless están protegidos 100% contra el fraude y son seguros porque siguen realizándose con lectura del chip, aunque no se haya introducido la tarjeta. Tendrás que teclear el PIN en las operaciones de más de 50 €. Las tarjetas contactless ofrecen el mismo nivel de seguridad y protección que las tarjetas con chip y PIN.

Por seguridad, el sistema contactless estará desactivado hasta que realices una primera transacción con PIN.

Además esta tecnología tiene otra ventaja y es que, como al realizar el pago no tienes que entregar la tarjeta, en ningún momento la pierdes de vista.

Para realizar una operación sin PIN (inferior a 50 €) siempre es necesario que:

El terminal contactless esté activo.

La persona que te atiende haya tecleado el importe

Mantener la tarjeta inmóvil un instante a menos de 2cm de distancia del terminal para proceder a la lectura del chip.

El lector del chip solo se activa en el momento en que se introduce una cantidad en el terminal, y regresa al modo de espera tan pronto finaliza la venta. En modo de espera el lector no puede realizar nunca cobros, así que nunca te cobrarán nada si accidentalmente acercas la tarjeta a un terminal.